El proyecto del parque eólico de Riffgat se encuentra en el Mar del Norte, cerca de la isla alemana Borkum e incluye la instalación de 30 monopilotes en los cuales se construirán 30 aerogeneradores. Los monopilotes pesan entre 480 y 720 toneladas, con una longitud de entre 53 y 70 metros y un diámetro de 4,7m en cabeza y entre 5,7 y 6,5m en la punta.
Como resultado del exitoso proyecto del Hong Kong-Zhuhai-Macau Bridge project el contratista Seaway Heavy Lifting escogió la opción de utilizar un martillo vibratorio para la instalación de monopilotes. Al escoger este innovador método, el proyecto pudo cumplir con las estrictas regulaciones alemanas y limitar el impacto ambiental por debajo de los límites de ruido y vibraciones admisibles. Utilizando los tradicionales martillos hidráulicos de impacto resultaría en niveles de ruido que causarían importantes daños a la vida marina. Además de ello, los martillos vibratorios permiten reposicionar fácilmente el pilote si este se hubiera instalado con un ángulo inicial demasiado elevado, como fue el caso durante la ejecución del proyecto.
El contrato se lo llevó CAPE-Holland, el cual desarrolló un martillo modular, el Super Quad Kong (SQK), especialmente diseñado para este proyecto offshore. CAPE-Holland cooperó en este proyecto con Allnamics, el cual llevó a cabo los estudios de hincabilidad con el programa AllWave-PDP para los monopilotes.
Tras la hinca de los primeros monopilotes, era claro que la capacidad de este martillo modular era más que suficiente. Para suelos arenosos únicamente el 50% de la energía total del martillo se requirió, permitiendo la hinca de los monopilotes hasta una penetración de 31 metros de manera continua. Sin embargo, el proyecto de Riffgat también tenía emplazamientos con arcillas duras, y se necesitó el exceso de potencia para hincar el pilote hasta una posición estable con esas condiciones del terreno.
Debido a que el cliente requirió un conteo de golpes como una indicación de la capacidad portante del pilote y además había cierta preocupación de cuanta resistencia del terreno se degradaría con el martillo vibratorio, los últimos 10 metros debían ser hincados con un martillo de impacto (utilizando un martillo hidráulico IHC S-1800). Como parte de los estudios de hincabilidad, Allnamics indicó que esta era un escenario conservador. Esta opinión fue corroborada al comienzo de la rehinca con martillos de impacto, mostrando un conteo de golpes de 100 golpes/25cm con una energía de impacto de 1200 kJ, la cual demostró una clara recuperación de la resistencia del terreno tras la hinca por vibración. Además de ello, antes de que el martillo hidráulico pudiese usarse, se tuvo que instalar alrededor del pilote un sistema de mitigación del ruido (NMS), el cual mostró claramente el impacto ambiental de ambos métodos de instalación.
Debido a que las predicciones de hincabilidad mostraron un potencial rechazo anticipado antes de llegar a la profundidad objetivo, se decidió realizar una pequeña prueba de hinca por vibración en los emplazamientos con arcillas duras, instrumentando el pilote con extensómetros y acelerómetros en el pilote para realizar Vibratory Driving Analysis (VDA). Los resultados del VDA se han utilizado para refinar los estudios de hincabilidad para monopilotes.